Brasov es una de las ciudades más grandes de Rumania, y en el pasado fue la capital de Transilvania. La antigua ciudad sajona está encerrada dentro de las murallas de la ciudad, sobre las cuales se eleva la montaña de Tampa, desde la que se puede admirar el panorama de la zona.
Brasov es una de las siete ciudades históricas de Transilvania que dio nombre a la región. En el pasado, fue habitada por colonos sajones que crearon una ciudad basada en el patrón alemán. Los rumanos se asentaron en los suburbios, donde hasta hoy, detrás de la puerta Schiei, ha sobrevivido un poco de caos, edificios de poca altura agrupados alrededor de calles sinuosas.
El centro de Brasov es una gran plaza de mercado rodeada de casas de diferentes épocas. En su centro se encuentra un histórico ayuntamiento, que hoy alberga un museo. Alrededor de las casas de vecindad, ahora hay restaurantes, bares y cafés, y detrás de una de las fachadas burguesas se esconde una pequeña iglesia ortodoxa, cuyo interior está cubierto de policromías.
El monumento más importante de la ciudad es la Iglesia Negra Gótica. Su nombre proviene de la incursión de hollín en sus muros, que se formó durante uno de los incendios de la ciudad. Es una de las iglesias góticas más grandes de Rumania. Su interior está decorado con coloridas alfombras orientales, que los comerciantes de Brasov ofrecieron como ofrendas votivas para un viaje seguro.
La colina boscosa de Tampa se eleva por encima de Market Square. Puede llegar a su cima, donde hay una cafetería, en funicular. Hay una hermosa vista del casco antiguo y los restos de fortificaciones con fragmentos de murallas y torres de defensa.
