Alberobello es una ciudad como de un cuento de hadas. Todo esto se debe a sus edificios inusuales que figuran en la lista de la UNESCO. Hay casas redondas con techos cónicos de piedra que se asemejan a grandes colmenas.
Las casas trulli de Alberobello son una de las principales atracciones no solo de la ciudad, sino también de toda Puglia. Fueron construidos por residentes locales para evitar impuestos. Las tarifas debían pagarse solo por las estructuras sólidas de ladrillo, y los trulli se consideraban viviendas temporales.
La mayor concentración de trulli se encuentra en el mismo Alberobello. Hoy están bien cuidados, pintados de blanco y sus techos están decorados con pinturas simbólicas. Macetas y enredaderas plantadas junto a las fachadas se suman a su encanto. Muchas casas están destinadas al alquiler o pequeñas tiendas de souvenirs, pero algunas de ellas aún están habitadas por sus dueños. Trulli también se puede visitar en varios pueblos cercanos, donde hay menos tráfico turístico que en Alberobello.