Grand-Place es el lugar central de Bruselas, conocido por su riqueza decorativa y estética. La plaza está rodeada de casas gremiales, el Ayuntamiento y la Maison du Roi. En 1998 fue inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Aquí se llevan a cabo numerosas celebraciones, actuaciones y conciertos, y cada dos años, a mediados de agosto, se coloca una alfombra de flores en la plaza.
El mercado, delimitado antes de 1348, tiene una forma irregular, sin edificaciones interiores. En el siglo XIV se construyó aquí la Maison du Roi, un edificio neogótico, y en el siglo XV se erigió el Ayuntamiento con una torre altísima. Estas instalaciones fueron demolidas en 1695 durante el incendio de la ciudad por la artillería francesa, y luego reconstruidas y ampliadas. Las casas gremiales se construyeron alrededor de la plaza del mercado a finales de los siglos XVII y XVIII.
Los inicios de la plaza se remontan a los siglos XI-XII, cuando se construyeron las primeras casas de madera en el pantano drenado. La cercana ruta comercial que conecta Renania con Flandes hizo que, a principios del siglo XIII, se construyeran aquí tres mercados donde se vendían productos alimenticios y telas. Posteriormente se construyeron el Ayuntamiento, las sedes de los gremios de comerciantes y numerosas casas de vecindad y la plaza del mercado comenzó a cumplir funciones sociales y políticas.