La región de Liberec es la más pequeña de las regiones checas. Está ubicada en la parte norte del país, en la frontera con Polonia y Alemania. Una gran parte está cubierta por montañas, incluida la más alta de la República Checa, las Montañas de los Gigantes.
La parte norte de la región está formada por zonas montañosas, que son un lugar popular para el turismo activo. Las más famosas son las Montañas de los Gigantes, con la montaña más alta de la República Checa, Śnieżka. Hay numerosas rutas de senderismo, ciclismo y esquí en invierno. Los centros turísticos al pie de las Montañas de los Gigantes son Spindleruv Mlyn, Pec pod Sněžkou y Jánské Lázne.
Sin embargo, las montañas Karkonosze no son las únicas zonas montañosas de esta región. También están las montañas Jizera, caracterizadas por un clima severo, y las montañas Jested ubicadas en los suburbios de Liberec.
Liberec en sí es una ciudad interesante en términos de monumentos, con un bonito casco antiguo y varios museos, incluido el Museo Técnico. La mayor fama, sin embargo, lo llevó al Babylon Center, construido a principios del siglo XXI, que es una combinación de un centro científico, un parque de diversiones y un parque acuático.
La región también es rica en monumentos del pasado, como el famoso Castillo de Trosky sobre una roca alta, el Castillo de Hruba Skala y el Palacio de estilo neogótico Sychrov con sus maravillosas decoraciones interiores.