Pau es una ciudad histórica a los pies de los Pirineos, famosa por el magnífico Castillo de los Borbones, donde nació el rey Enrique IV.
Pau fue fundada en el siglo XII alrededor del castillo de la familia Bearn. Debido a su ubicación, fue durante siglos territorio disputado entre Francia y España. En el siglo XV pasa a formar parte del Reino de Navarra y en el siglo siguiente cae en manos de los Borbones. En 1553, nació Enrique IV en el castillo local.
La principal atracción de Pau es el Museo Nacional y el Castillo de Pau rodeado por el Jardín del Castillo. Se trata de un edificio renacentista en el que se han puesto a disposición de los visitantes una serie de salones y salas con decoración de época. Presenta muebles y artesanías de las colecciones del Museo Nacional. La colección incluye tapices, porcelana, relojes, vidrio y joyería, además de pinturas y esculturas. Igualmente atractivos son los Jardines del Castillo de Pau, decorados al estilo francés.
Además del castillo, también hay otras huellas del pasado en Pau. Incluyen, entre otros Catedral románica de la Virgen María, edificio del siglo XVI donde solía reunirse el parlamento de Navarra y el Palacio de Beaumont construido a finales del siglo XIX y XX.