Maison Carrée es un antiguo templo romano construido en el siglo I. En 1840, el edificio fue declarado monumento histórico. Los visitantes pueden admirar, entre otros pórtico con columnata y entablamento de orden corintio y la entrada al templo llamado techo de pronaos del siglo XVIII. En el interior del edificio se proyecta una película sobre la historia de la ciudad de Nimes.
El templo estaba dedicado a los hijos de Mark Agrippa, que eran los nietos cosidos del primer emperador romano Octavio Augusto: Lucius y Gaius. Durante siglos, el templo sirvió como, entre otros casa consular, residencia privada, establo, iglesia y sede de la primera prefectura de la región de Gard.
El templo es considerado el mayor monumento de la antigüedad y ha sido una fuente de inspiración para los arquitectos que buscan patrones clásicos desde el Renacimiento.