La reserva natural se estableció en 1999 en Córcega y su propósito es proteger el patrimonio costero y marítimo del estrecho de Bouches de Bonifacio combinando influencias alpinas y africanas. En el área de la reserva se puede admirar la rica flora y fauna de, entre otros rocas de granito, acantilados de piedra caliza, humedales, cuevas marinas, dunas de arena, lagunas y un arrecife de coral. Para los visitantes, también hay rutas turísticas señalizadas y la posibilidad de realizar un crucero.
También hay, entre otros, en la reserva Estanque de Ventigune, acantilados de Bonifacio, Cabo Pertusato y la reserva natural Tre Padule en Suartone, que protege la flora y fauna de los tres lagos pantanosos, que incluyen, entre otros, especies endémicas.
La reserva cubre un área de más de 790 km2 y es la reserva natural francesa más grande.