La pintoresca playa de arena fina y dorada se extiende por más de un kilómetro de longitud. Gracias a la buena calidad de los servicios disponibles, es un buen lugar para familias con niños. Hay baños, duchas y vestuarios. Hay bares y restaurantes cerca, así como un aparcamiento. Durante la temporada, el lugar está custodiado por socorristas.
La playa es conocida como la cuna del surf. Debido a las altas olas, es popular entre los surfistas locales y extranjeros. Hay varias escuelas y clubes de surf que operan allí. La playa ofrece vistas panorámicas de gran parte de la costa española. Solo cabe mencionar que con la marea alta casi toda la arena desaparece bajo el agua.
Hay dos entradas a la playa. Uno está situado junto al aparcamiento y el otro, adaptado para personas con discapacidad, discurre por el Boulevard du Prince de Galles.