Xàtiva es una ciudad pequeña e histórica, conocida principalmente por el poderoso castillo de la época árabe que se eleva sobre ella. También hay un pintoresco casco antiguo con casas de piedra de los períodos medieval y renacentista.
La ciudad es uno de los asentamientos más antiguos de España. Sus orígenes se remontan a tiempos prehistóricos. Antes de la llegada de los romanos, los íberos habían construido su fortaleza en la colina. También acuñaron su propia moneda, lo que demuestra la importancia de este centro. Hoy, la antigua fortaleza de los íberos es el llamado Castillo Menor, que forma parte del Castillo de Xàtiva. Sobre él se eleva el Castillo Mayor construido por los romanos, y luego reforzado y ampliado por los moriscos. Ambas partes se pueden visitar hoy. Además de los edificios residenciales y de cera, también hay dos capillas, la Capilla de St. George y la Capilla de Santa María, y desde las paredes hay una hermosa vista de los alrededores.
Fueron los moriscos quienes dieron un fuerte impulso al desarrollo de la ciudad en la Edad Media. Xàtiva fue el primer lugar de Europa donde se producía papel. La receta para su ejecución fue traída por los árabes, y las papeleras locales se mantuvieron entre los líderes del continente durante mucho tiempo.
Debajo del castillo está el casco antiguo, un laberinto de calles. Entre los densos edificios de piedra destaca la silueta monumental de la Colegiata renacentista de Santa Maria de Xàtiva. Destacan también la fachada del antiguo hospital de pobres, decorada en estilo plateresco, y la iglesia de St. Felix de pie sobre los cimientos de la basílica visigoda.