Augsburgo es una de las ciudades más grandes de Baviera y una de las ciudades más antiguas de Alemania. Fue fundada en la época romana, pero hoy está asociada principalmente a la historia de la Reforma. Hay muchos edificios históricos interesantes en la ciudad, incluido el ayuntamiento y la iglesia de St. Anna, que alberga la famosa Capilla Dorada.
La ciudad fue fundada en el siglo I a. C. como el campamento militar romano de Augusta Vindelicorum. Rápidamente se convirtió en un importante centro comercial y, en el siglo VI, también se convirtió en la sede del obispado. Augsburgo disfrutó de su apogeo en los siglos XV y XVI, cuando se convirtió en uno de los principales centros económicos y culturales de Baviera. En 1518, estuvieron detenidos aquí durante algún tiempo antes del juicio de Martín Lutero. Los vínculos posteriores con la Reforma son aún más significativos. En 1530, se proclamó aquí la Confesión de Fe de Augsburgo, que sigue siendo la base del funcionamiento de la Iglesia Evangélica, y en 1555 se firmó la paz que puso fin a las guerras religiosas en Alemania.
El casco antiguo de Augsburgo fue parcialmente destruido durante la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, aquí se han conservado bastantes casas de vecindad y palacios renacentistas y barrocos tempranos. Sus fachadas ornamentadas se elevan a lo largo de amplias calles que convergen en la Plaza del Mercado. Su edificio principal es el Ayuntamiento, donde se puede admirar el Salón Dorado decorado con murales y decoraciones en estuco.
El monumento más importante de Augsburgo es la Iglesia de St. Anna, que forma parte del antiguo monasterio carmelita. Fue construido en el siglo XIII, pero fue reconstruido muchas veces, incluso en el siglo XX, durante la reconstrucción de la ciudad después de la destrucción de la Segunda Guerra Mundial. El edificio gótico alberga docenas de lápidas y epitafios de importantes ciudadanos de Augsburgo del apogeo de la ciudad. Sin embargo, los dos mayores tesoros del templo son la Capilla Fugger renacentista con una escultura de Jesús sostenida por ángeles y la Capilla Dorada cubierta con frescos. En las instalaciones del antiguo monasterio se puede visitar el museo dedicado a la Reforma y la figura de Martín Lutero.