La Catedral Metropolitana Ortodoxa de Iasi fue construida en 1887. Su arquitectura ecléctica presenta elementos de los estilos neoclásico, neobarroco y neorrenacentista. El diseño del templo se inspiró en el arte del Renacimiento italiano tardío y la arquitectura de las iglesias austrohúngaras.
El interior de la catedral está decorado con vidrieras de Munich y pinturas de Gheorghe Tattarescu, que combinan la tradición rumana con influencias occidentales, principalmente pintura italiana. Las cuatro escenas bíblicas representadas en la nave son especialmente dignas de mención. También hay un iconostasio realizado por Ioan Babic. Los dos iconos más valiosos proceden del siglo XVI y representan al Cristo Pantera y la Virgen con el Niño.
La catedral es uno de los edificios históricos más altos de Moldavia. Tiene 57 m de largo y 34 m de ancho, y sus torres superan los 52 m de altura.