Pinturas de Rembrandt

Dos de las pinturas de Rembrandt ubicadas en el Castillo Real son retratos: "La niña en el marco de la imagen" y "El erudito en el atril", que forman parte del legado de la familia Lanckoroński. Ambas obras pertenecieron a la galería Stanisław August, como lo demuestran las firmas colocadas en ellas.

La historia de las pinturas es turbulenta, e incluso a finales del siglo XX, las obras plantearon dudas sobre su autenticidad. Los retratos pertenecieron a la familia von Kamecke, más tarde a Stanisław August, el príncipe Józef Poniatowski y su hermana, Kazimierz Rzewuski y su hija Ludwika, casada con Antoni Józef Lanckoroński. Las obras de la famosa familia fueron tomadas por la Gestapo y, al final de la guerra, se colocaron en un depósito en Altaussee, cerca de Salzburgo, y después de la liberación, en Central Art Collecting Point en Munich. De ahí volvieron a la familia Lanckoroński. El 26 de octubre de 1994, la profesora Karolina Lanckorońska los donó junto con otras obras como regalo a la nación polaca. Después de 1994, las pinturas fueron donadas al Castillo Real de Varsovia.

Las obras pintadas sobre tablas de álamo se han conservado varias veces, también en el estudio del Castillo Real de Varsovia. La autenticidad de las pinturas se confirmó en 2006 después de muchos años de investigación realizada por un destacado especialista del Proyecto de Investigación Rembrandt: el prof. Ernst van de Wetering. Estas son dos de las tres pinturas de este artista en Polonia.