Opatów, ubicada en el pasado en una importante ruta comercial, puede presumir de varios pisos de bodegas y pasillos bajo el casco antiguo. En el pasado, se utilizaron para almacenar vino y otros bienes transportados. Hoy son un atractivo turístico. Allí funciona la Ruta Turística Subterránea desde hace varias décadas. Es un viaje de medio kilómetro por la historia de la ciudad.
Los subterráneos en Opatów comenzaron a surgir alrededor del siglo XIII. Se cavaron varios pisos de cámaras y pasillos debajo de la plaza del mercado, calles cercanas y casas de vecindad. Las bodegas fueron utilizadas por comerciantes y artesanos locales. El redescubrimiento del inframundo comenzó a mediados del siglo XX. Una vez realizados los trabajos de investigación y protección, se pusieron a disposición de los visitantes 46 cámaras ubicadas en tres plantas. Es un lugar muy atmosférico. El recorrido está iluminado por faroles de metal, y en vitrinas hay exposiciones dedicadas a la historia de la ciudad. Y el turismo enriquece la historia de los guías que acompañan a los turistas.