Billingshurst Cavern es una atracción exclusiva para los amantes del buceo. La cueva tiene unos 60 m de largo - por un lado llega a la superficie del mar, por el otro lado tiene unos 30 m de profundidad. Debido a la relación entre el largo y el ancho, a menudo se le llama "túnel ferroviario". También se le conoce como Booming Cave debido al ruido dentro de la cueva causado por las olas que golpean el acantilado.
El túnel conduce a una cueva ovalada en las profundidades del acantilado, que no está completamente llena de agua; puedes ascender a la superficie y tomar algo de aire. La entrada al agua se realiza en Reqqa Point (en verano suele haber una escalera para ayudarte a descender al agua) o desde un barco directamente sobre la cueva, que se abre a unos 3 m del acantilado.
Billingshurst Cavern requiere mucha experiencia: el buceo se realiza en una oscuridad casi total y, con iluminación artificial, la visibilidad no supera los veinte metros.