El Monte Palatino es una de las siete colinas de Roma, el sitio del asentamiento más antiguo llamado Roma quadrata. Aquí, en la Gruta de Lupercal, la loba alimentaría a Romulus y Remus. En 2007, a 16 metros de profundidad, se descubrió en el Palatino una cueva decorada con mármol y conchas, considerada esta legendaria gruta.
La colina también fue la sede de los romanos ricos. Había villas de aristócratas, cónsules, tribunos del pueblo y oradores como Cicerón, Craso, Cayo Octavio, Publio Clodio Pulcher y Catulo. También hubo templos (incluido el Templo de Victoria, el Templo de Júpiter) y palacios (Palacio de Domiciano, Palacio de Septimus Severus, Palacio de Domus Augustiana).
Todos estos magníficos edificios se conocieron colectivamente como Palatine Hill, y de ahí la palabra italiana para palazzo, palais francés y palacio polaco, según se informa. El nombre de la colina en sí probablemente se derivó del nombre de la diosa Pales.