Gregorio de Nin (muerto en 929) fue un obispo a quien se le atribuyen los esfuerzos por introducir el idioma croata en la liturgia católica. La estatua sobrenatural, descubierta en el 1000 aniversario de la muerte del obispo, es obra de Ivan Meštrović. El dedo gordo del pie izquierdo del obispo está perfectamente pulido con las manos de los turistas; se dice que tocarlo trae felicidad y hace realidad los sueños ocultos.
La estatua del obispo Gregorio se colocó originalmente en el peristilo del palacio del emperador Diocleciano. Durante la Segunda Guerra Mundial, cuando la ciudad fue invadida por italianos, el monumento fue trasladado fuera de la ciudad. Cuando regresó a Split, se marcó una nueva ubicación en las cercanías del campanario y la capilla de St. Rajner de Split.
Gregorio de Nin iba a participar en dos sínodos en Split en 925 y 928. Sus esfuerzos no tuvieron éxito: en el primer sínodo, los servicios religiosos estaban estrictamente prohibidos en croata, y los sacerdotes que no sabían latín tenían prohibido ocupar puestos más altos en la jerarquía eclesiástica.
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