Baden bei Wien es una ciudad balneario a las afueras de los bosques de Viena, a solo 25 km de Viena. Las aguas azufradas locales se conocen desde la época romana, y el complejo floreció durante la época del Imperio en el siglo XIX, cuando los gobernantes del Imperio Austro-Húngaro disfrutaban de sus vacaciones aquí.
Las ruinas de los antiguos baños, que han sobrevivido hasta nuestros días, atestiguan el pasado romano del balneario. Sin embargo, los turistas se sienten atraídos principalmente a Baden por la atmósfera de un centro turístico imperial. El centro está construido con edificios eclécticos y neoclásicos del siglo 19. Junto a él, hay un pintoresco parque balneario con la antigua Casa Spa convertida en casino. Debido a su importancia en el desarrollo de balnearios en Europa y a los edificios conservados, Baden bei Wien, junto con otros 10 centros turísticos de toda Europa, se incluyó en una entrada conjunta en la lista de la UNESCO.
La principal riqueza de Beden bei Wien son sus aguas minerales azufradas. Se utilizan en varias decenas de sanatorios, casas de vacaciones e instalaciones de spa, donde se utilizan tanto para bañarse como para beber, como soporte para diversos tratamientos.
Por un lado, Baden bei Wien es un animado balneario y lugar de relajación y, por otro lado, el punto de partida perfecto para excursiones a pie y en bicicleta por los bosques de Viena. Las colinas boscosas de la zona, que forman parte de los Alpes orientales, son perfectas para el turismo activo. Se ve favorecida por decenas de kilómetros de senderos marcados en la zona.