Kroměříž es una de las ciudades más atractivas de Moravia para los turistas. Desde 1777, fue la residencia de los arzobispos de Olomouc y fue a su cuidado que debió su gran desarrollo. En 1998, el Palacio Arzobispal y sus jardines fueron incluidos en la lista de la UNESCO.
La historia de Kromieryż se remonta al siglo 13. La ciudad perteneció al obispado de Olomouc, y los propietarios se encargaron de su desarrollo. Fue principalmente un centro comercial y artesanal, y con el tiempo también se convirtió en el centro administrativo de extensos bienes de la iglesia. Las épocas de mayor esplendor de la ciudad cayeron en el período comprendido entre los siglos XVII y XIX, época en la que se construyeron los edificios más importantes de la ciudad, que se pueden admirar hasta nuestros días.
En 1643, Kromieryż fue destruido por el ejército sueco. El entonces obispo de Charles Liechtenstein participó en la reconstrucción. Por orden suya, el Palacio Arzobispal de Kroměříž fue reconstruido, dándole las características del estilo barroco. Posteriormente sus interiores fueron decorados siguiendo la moda rococó y hoy es uno de los palacios barrocos más bellos y valiosos de la República Checa. En el interior, además de ricas decoraciones, se pueden ver, entre otros obras de Tiziano y Luke Cranach.
Durante la reconstrucción del castillo, el obispo Charles Liechtenstein también ordenó la creación de jardines. Junto con el palacio, el jardín del castillo y el jardín de flores están hoy en la lista de la UNESCO. El primero es un parque paisajístico con numerosos elementos de pequeña arquitectura, puentes, pabellones chinos o la columnata pompeyana. A su vez, el Flower Garden se estableció al estilo francés. En su parte central hay una rotonda rococó y está rodeada de laberintos de flores y arbustos bajos.
Además de los monumentos relacionados con la antigua residencia de los obispos en Kroměříž, también puedes ver un bonito casco antiguo con varias iglesias góticas y barrocas, una plaza del mercado rodeada de casas con fachadas coloridas y el Museo Kroměřížska, que alberga monumentos relacionados con la historia de la ciudad.