Hradec Kralove es la capital de la región de Bohemia Oriental. Situada en la desembocadura del río Orlice y el río Elba, la ciudad tiene un centro histórico y alberga varios museos. Uno de los festivales de rock más grandes de la República Checa, Rock For People, tiene lugar aquí todos los años.
La historia de la ciudad se remonta a los inicios del estado checo. En el siglo X fue la sede del príncipe, y en el siglo XIII el castillo obtuvo los derechos de ciudad y se convirtió en una ciudad real. En la Edad Media, Hradec Kralove era una ciudad comercial ubicada en el cruce de rutas importantes, incluidas las que conducían a Praga. El trazado espacial de ese período se ha conservado hasta nuestros días, y el monumento gótico más importante de la ciudad es la Catedral del Espíritu Santo.
Junto al templo hay una capilla barroca de St. Klemens, la torre blanca renacentista. Es el mejor mirador de la ciudad, y cuando hace buen tiempo se pueden admirar los picos de las montañas Karkonosze y Orlické. Dentro del casco antiguo, también hay una plaza del mercado con casas coloridas y la Iglesia de la Asunción de la Santísima Virgen María del siglo XVIII.
El parque Jirasek es un lugar popular de descanso y recreación para los habitantes de Hradec Kralove. Además de los senderos para caminar, hay campos deportivos, y en el Elba hay una pequeña central hidroeléctrica de estilo Art Nouveau con un centro de información de energías renovables. Otro atractivo del parque es la iglesia de madera de St. Nicolás.
Hradec Kralove es la sede del Museo de Bohemia Oriental, ubicado en un edificio Art Nouveau de principios del siglo XX, diseñado por Jan Kotera. Sus exposiciones muestran la historia de esta zona desde la prehistoria hasta la actualidad. La ciudad también tiene una Galería de Arte Moderno y un museo privado de muñecas y juguetes, Panenkarium.