El Museo de la Catedral de Mdina está considerado como uno de los mejores museos de iglesias de Europa. La colección incluye muchas pinturas valiosas, grabados de Rembrandt, relicarios antiguos y manuscritos medievales originales, incluidos los registros de la Santa Inquisición de principios del siglo XV. El Museo de la Catedral es famoso por la rica colección de obras de Alberto Durero (1471-1528), considerado el mayor artista del Renacimiento alemán.
La colección Durero consta de una extensa colección de xilografías y planchas de cobre. En ella destacan la serie La vida de la Virgen (una serie de escenas de la vida de la Virgen María) y La pequeña pasión (imágenes de la pasión y muerte de Cristo). La colección de varias esculturas de los Apóstoles realizadas en oro y plata merece una atención aparte.
La sede del Museo Catedralicio es un suntuoso palacio barroco, construido en 1733 por orden del arzobispo Mdina Paolo Alpheran de Bussan (1728-1757). Albergaba un seminario teológico: el museo se estableció en 1969.