Fort Saint Angelo es un bastión en el centro de Grand Harbour, que se hizo famoso como la sede de los Caballeros Hospitalarios en Malta durante el asedio otomano en 1565. En los años 1800-1979, una guarnición británica estaba estacionada en el fuerte. El edificio sufrió graves daños durante la Segunda Guerra Mundial y luego fue reconstruido. Desde 1998 está en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Se desconoce la fecha exacta en la que se construyó Fort Saint Angelo. Se sospecha que ya existían fortificaciones en época prehistórica y romana, como lo demuestran los hallazgos arqueológicos. Los joanitas que llegaron a Malta en 1530 establecieron aquí la sede del Gran Maestre. El fuerte fue completamente reconstruido y rearmado. La forma actual del edificio es el resultado de la modernización llevada a cabo a finales del siglo XVII, tras la cual el baluarte fue equipado con 80 cañones.
El fuerte tiene su espíritu: una tal Dama Gris, la amante de uno de los castellanos, que fue asesinada y tapiada en las mazmorras de la fortaleza. El fantasma, a pesar de los exorcismos realizados a principios del siglo XX, no permitió que lo sacaran de la fortaleza.