Palamós es un famoso balneario de la Costa Brava, famoso por sus hermosas playas y su pintoresca ubicación. La ciudad combina el encanto de un antiguo pueblo de pescadores y las ventajas de un moderno centro vacacional con instalaciones recreativas y de entretenimiento bien desarrolladas.
El pueblo está situado en una bahía y consta de dos partes, un antiguo pueblo de pescadores con edificios tradicionales conservados, un puerto y un muelle donde los pescadores venden pescado y marisco fresco, y un moderno complejo con hoteles y apartamentos de vacaciones en alquiler.
La playa más importante es la de La Fosca, cubierta de arena dorada con pequeñas rocas en la orilla. Un poco alejada de la parte principal de la ciudad se encuentra la playa de arena de Castell, donde puedes, por ejemplo, alquilar kayaks y otros equipos acuáticos. Un ambiente completamente diferente lo ofrece la estrecha playa de guijarros en la bahía de Margerita, situada en la parte pesquera del pueblo, donde se pueden ver las casas tradicionales de los pescadores y los barcos que se balancean en el agua. La paz y el ambiente íntimo se pueden encontrar en la Bahía de S'Alguer, rodeada de casas tradicionales.
El monumento más importante de Palamós es el Castillo de Sant Esteve, situado en lo alto del acantilado junto al mar. Se accede por un camino desde la playa de La Fosca. Desde lo alto hay unas vistas inolvidables de la costa.