El invernadero “Frigorífico” del Parque Juan Carlos I de Madrid es una estructura parcialmente cerrada que utiliza sistemas de calefacción pasiva para crear un microclima en el interior. Por su orientación y el uso de paneles de vidrio, se consigue una climatización natural sin consumo energético. Existe una colección botánica de 220 especies de plantas exóticas.
Entre ellos hay un sendero educativo. El invernadero fue construido en 1996 con hormigón y vidrio en un plano rectangular. La estructura está semienterrada, con techo y lamas laterales de hormigón. Su superficie es de 4.000 m2 y la altura es de 12 m El eje principal está orientado al oeste y al este.
En el invernadero se pueden encontrar 12 espacios: un jardín japonés minimalista, un estanque, una zona de bambú, una zona suculenta, un espacio para cícadas y palmeras, un espacio de plantas que gustan del suelo ácido, una zona de cítricos, un bosque de ribera, un espacio de helechos y una zona circundante al invernadero dedicada a la vegetación autóctona mediterránea.