Las ruinas romanas, también conocidas como las ruinas de Cartago, se encuentran en los jardines del palacio de Schönbrunn, al pie de la colina de Schönbrunn. Estas no son ruinas reales, sino solo una imitación creada artificialmente que sirve como decoración de jardín. Las ruinas están inspiradas en el antiguo templo romano de Vespasiano y Tito.
La composición consta de una piscina cuadrada, rodeada por tres lados por una columnata y fragmentos de paredes decoradas con relieves. La composición se complementa con bustos y esculturas colocadas en diversos lugares. En medio de la piscina hay esculturas que representan dos figuras, personificaciones del Danubio y Ania.
Las ruinas fueron diseñadas por Johann Ferdinand Hetzendorf von Hohenberg y construidas en 1778. Los adornos de piedra fueron realizados por los escultores Beyer, Henrici y Franz Zächerle. Este tipo de ruinas artificiales han sido un elemento de moda en el diseño de jardines desde mediados del siglo XVIII.