El Monumento a los Héroes del Ejército Rojo en Viena conmemora a varios miles de soldados soviéticos que murieron durante las batallas por Viena en marzo y abril de 1945. El monumento tiene forma de columna con una escultura de un soldado del Ejército Rojo. En el pedestal hay una inscripción en ruso y alemán que dice "Monumento a la gloria de los soldados del ejército soviético que liberaron a Austria del fascismo".
El monumento fue diseñado por el escultor MA Intesarjan y el arquitecto SG Yakovlev. Para su ejecución se utilizaron piedra, mármol y bronce, y la altura total del monumento es de 12 metros. La ceremonia de inauguración tuvo lugar el 19 de agosto de 1945. Asistieron los comandantes del Ejército Rojo, el canciller y secretarios de estado austríacos y el alcalde de Viena.
En el siglo XXI, el Monumento a los Héroes del Ejército Rojo fue víctima de vandalismo por motivos políticos en varias ocasiones. La destrucción se hacía más a menudo vertiendo pintura roja o negra sobre el monumento.