Rottweil es una pequeña ciudad histórica que ha conservado el trazado urbano medieval y los edificios del casco antiguo. También se encuentra el mirador más alto de Alemania: la torre de pruebas ThyssenKrupp.
La ciudad se remonta a la época romana, cuando aquí existía el asentamiento de Arae Flaviae. En su lugar, se desarrolló una ciudad que a lo largo de su historia estuvo bajo el dominio alemán, suizo y francés.
El nombre de la ciudad proviene de la raza de perros Rottweiler, que fue creada como resultado de un cruce entre perros traídos por los romanos y los lugareños. Fueron utilizados para custodiar ganado y, debido a su fuerza, como animales de tiro. La historia de estos perros es recordada por el monumento Rottweiler en el centro de la ciudad.
El Centro Rottwail ha conservado su carácter medieval con la Catedral de la Santa Cruz del siglo XII, donde se puede ver el altar tallado por Vitus Stoss, la Torre Negra gótica y la iglesia Kapellenkirche del siglo XIV. En las afueras de la ciudad se encuentran las ruinas del castillo de Bernburg.
Un punto culminante moderno de Rottweil es la torre de pruebas Thyssenkrupp. La empresa lo utiliza para probar ascensores y ascensores. A una altitud de 232 m, hay un mirador, considerado el más alto de Alemania.