Breitnau es un destino turístico de montaña en el valle de Höllental en la Selva Negra. Tiene una ubicación pintoresca entre montañas y desfiladeros rocosos y es una buena base para practicar senderismo en la zona.
Desde la Edad Media, una ruta comercial de Austria a Francia atravesaba el valle de Höllental. En 1755, la procesión nupcial de María Antonieta lo recorrió, que se conmemora con una pintura en la pared de la histórica posada Hofgute Sternen. En el siglo XIX, se construyó aquí una línea de ferrocarril, que sigue siendo un gran atractivo de Breitnau en la actualidad.
La ciudad no forma un desarrollo compacto, sino que consta de muchas aldeas y granjas individuales diseminadas en las laderas de la montaña. Algunas de ellas han conservado su aspecto original, característico de la Selva Negra, con tejados inclinados que llegaban casi hasta el suelo, lo que facilitaba la eliminación de la nieve.
El principal atractivo de la zona de Breintnau son los terrenos montañosos con numerosas rutas de senderismo. Las rocas de Piketfelsen son un mirador popular y un destino de excursiones. A su vez, el estrechamiento del valle de Höllental en un lugar llamado Hirschsprung, o Jeleni Skok, está relacionado con la leyenda de un ciervo que se suponía que saltaba sobre este lugar para escapar de los cazadores.